Foto: Suministrada
En la reunión que sostuvieron en la Casa de Nariño el presidente de la República, Iván Duque, y el secretario de Estado de los Estados Unidos, Mike Pompeo, entre otros temas, se tocó el objetivo de que las actuaciones violentas de bandas criminales, estructuras adscritas al servicio del narcotráfico y los miembros de las guerrillas cesen en Colombia y que sus responsables paguen por sus actos.
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Dentro de este discurso, el llamado de los dos funcionarios es para que las actuaciones del Ejército de Liberación Nacional (ELN), las disidencias de las extintas FARC o los otros grupos delictivos se terminen en el país, pero por parte del Secretario de Estado, también se mencionó a otro grupo que se vincula con la nación vecina de Venezuela.
“Estados Unidos agradece su liderazgo en la lucha contra Hezbolá en el hemisferio. Ejercer máxima presión sobre representantes de Irán es fundamental para la paz. Discutimos el deseo del pueblo de Colombia de contar con una paz justa y duradera y vemos que sigue la violencia de disidentes de las Farc, el ELN y otros grupos delictivos”, reconoció Pompeo.
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Recordemos que este grupo al que hace referencia Pompeo, habría surgido por la incidencia de grupos armados desde el Líbano o Irán y se presume, según reportes internacionales, tendría incidencia en territorio venezolano y se supone, con el completo conocimiento de las autoridades de este país sudamericano, según señalan desde los Estados Unidos.
