Este es el octavo caso en lo que va del año donde un menor de edad pierde la vida en circunstancias similares.
El verano en Estados Unidos empezó con una temporada demasiado fuerte a causa de las altas temperaturas que se han reportado en diferentes estados del país; esta vez cobró la vida de un bebé que murió asfixiado en el interior de un vehículo, al respecto su padre decidió quitarse la vida.
El hecho ocurrió a la altura del condado de Chesterfield en Washington (EE.UU.) cuando el hombre dejó al bebé en la parte trasera de su carro haciendo que el pequeño falleciera a causa de las altas temperaturas.
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Autoridades confirmaron que cerca de las 11:45 a.m del pasado 30 de junio recibieron una alerta de que un niño había sido dejado por largas horas dentro de un auto.
Es allí cuando la policía se acercó y encontraron al pequeño muerto. Por su parte, la madre del menor y las encargadas de la guardería a la que iba el niño confirmaron que este nunca llegó.
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Es así que el progenitor del menor se quitó la vida luego de enterarse de lo ocurrido. El padre de familia se suicidó con un arma en el jardín de su casa ayer 29 de junio.
Posible hipótesis
De acuerdo a la investigación, el padre se distrajo por algún motivo y lo dejó varias horas dentro de su carro. Y cuando volvió se dio cuenta de que había muerto por lo que se dirigió a su casa, y desesperadamente decide darse un balazo en la frente pues no soportaría que cargar con la culpa del olvido de su hijo.
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El estaba en compañía de su familia, les dijo lo que haría, pero no pudieron evitarlo porque al momento de que estaban llamando a las autoridades por sus declaraciones homicidas, salió al jardín y se disparó.
Con información de La Patilla