La mujer italiana a sus 72 años tiene la ilusión y el ánimo de realizar una gran travesía para descubrir nuevos paisajes. Vienna Camarota contó ante los medios de comunicación que toda su vida la vivió de esta manera, la señora siempre anduvo recorriendo las infinidades de rutas, caminos, pueblos y países del mundo. Vienna dijo que el viaje que pretende realizar lo hace por un motivo significativo.
Vienna Camaretta dijo que la ruta que ha decidido realizar es casi la misma que realizó Marco Polo para descubrir nuevos países.
La señora señala que a su edad no hay nada que la detenga. Camaretta mandó un mensaje dirigido a la sociedad en donde anotó lo siguiente: “La idea del viaje surgió cuando acabé el viaje de Goethe, entonces decidí seguir a Marco Polo, porque creo con sus libros escribió la historia de Oriente, un viaje que influenció a muchos, y que todavía continúa”, señaló.
Y continuó: “Cuando viajas, notas que no hay necesidad de hacer la guerra por motivos de raza o religión, porque todos somos hermanos”. Hasta el momento a señora Vienna Camarotta, es un ejemplo para muchos que sienten que el mundo se les cae.
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La mujer iniciará un trayecto de tres años en el que seguirá los pasos del famoso explorador italiano que dio a conocer en Occidente la Ruta de la Seda y atravesará países como Serbia, Turquía, Azerbaiyán, Irán, Kazajistán y Mongolia, hasta llegar a la capital de China, mientras un equipo médico monitorizará a distancia su condición física.
A sus 72 años, aunque sería difícil adivinarlo solo con verla, dada su complexión atlética, reconoce la emoción que le embarga por de iniciar esta aventura en la que solo la acompañará su gran mochila naranja, donde portará todas sus pertenencias y un ejemplar de”Los viajes de Marco Polo” gastado y marcado por todas sus anotaciones.
Cammarota también lanza un mensaje de paz en sus travesías. “Cuando viajas, notas que no hay necesidad de hacer la guerra por motivos de raza o religión, porque todos somos hermanos”, asegura.
También se dirige a la generación más joven para recordarles que “deben aprender sobre el mundo viajando”, pero no sólo de los monumentos principales, sino descubriendo lo que les rodea y sumergiéndose en la vida de los pueblos que visitan.