Debido a la crisis humanitaria y de seguridad en varios departamentos como Arauca, Norte de Santander y Boyacá, la Décima Octava Brigada del Ejército Nacional determinó suspender la vigencia de los permisos de porte de armas.
La medida tomada por las autoridades, que comenzó a regir desde el pasado 31 de enero y se extenderá hasta el 31 de diciembre del 2022 a las 11:59 de la noche, busca garantizar la seguridad de todos los habitantes de esta regiones.
Las autoridades mencionaron que en la medida se exceptúa a miembros activos de la fuerza pública, organismos nacionales de seguridad, cuerpos oficiales, funcionario judiciales, Fiscalía y Procuraduría, compañías de seguridad y miembros de los cuerpos diplomáticos reconocidos ante el Estado.
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El Ejército aseguró que quien porte un arma de fuego y no cuente con el permiso especial o no se encuentre de las excepciones contempladas, será sancionado con la incautación del arma.