A pesar que Europa lo ha dado todo al apostarle el futuro al coche eléctrico, el problema de no tener suficientes baterías le quita el sueño.
Europa tomó una decisión, saltar del coche convencional a los vehículos eléctricos. Los estados miembros del Parlamento y la Comisión Europea lograron llegar a un acuerdo sobre la reducción de emisiones de CO2, al prohibir a partir de 2035, la venta de los vehículos con motor de combustión.
El acuerdo al que se ha llegado se cerró el jueves 27 de octubre del presente año 2022 en Bruselas, y el hecho quedó como una negociación histórica por el bien del planeta al luchar contra el cambio climático. Según las cifras, se espera que la Unión Europea reduzca sus emisiones de gases de efecto invernadero en un 55% para el 2030; sin embargo, existe un problema que no se plantearon al momento de tomar la decisión…
A pesar de que la propuesta y el acuerdo sea llamativo por el hecho de querer combatir el cambio climático y todo lo que significa esto, la verdad es que en la práctica se le puede estar complicando la tarea a Europa para implementar este proyecto. ¿El porqué?, no hay suficiente producción de baterías en el mundo.
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El problema en las baterías radica en la producción de litio y níquel; la producción de estos dos elementos es limitada y algunas marcas ya están pensando en aliarse con empresas mineras para garantizar su suministro.
Ahora bien, suponiendo que hubiesen suficientes elementos para poder producir las baterías necesarias, el otro problema que tiene Europa para implementar el uso obligatorio de los vehículos eléctricos es que no hay las suficientes plantas de producción para las mismas baterías. “Según Benchmark Mineral Intelligence” el continente europeo demandará 735 GWh en baterías para finales de esta década, lo cual es de extrañar siendo que actualmente tienen un deficit de 66 GWh en su producción.
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Lo que está claro es que Europa se puede estar enfrentando a un problema difícil de resolver si quiere sacar este proyecto adelante; será un reto lograr que el continente alcance las cifras previstas teniendo en cuenta su baja producción de baterías.
