Este es el caso de un joven de 27 años que padece síndrome de down, y quien cumplió su anhelado sueño al conseguir un primer empleo, dando un ejemplo de perseverancia con su gran actitud.
Su sueño era el de iniciar su vida laboral y lo logró, libre de prejuicios y con una sonrisa así es como este hombre se gana la vida a diario.
Por hacer un buen pan en el establecimiento y su buena disposición con los clientes se ganó el reconocimiento entre sus compañeros y jefes de ser el empleado del mes del supermercado.
Este chico se llama German, tiene sindrome de down y está ganándose la vida como cualquier otra persona.
Basta de pensar que son inferiores o que no son capaces, son personas normales y corrientes y muy capacitadas para todo?? pic.twitter.com/yxbFdPRZlg— El Límite Del Bien (@ellimitedelbien) 12 de marzo de 2019