Foto: EFE
Contundente. Palabra que define las declaraciones del defensor italiano Giorgio Chiellini, quien concedió una entrevista a SOS Fanta, que recogió el medio Calciomercato, donde habló sobre la experiencia de compartir camerino con el mediocampista chileno Arturo Vidal, con el que estuvo en la Juventus de Italia.
En dichas declaraciones, el defensor central señaló que “el alcohol era el punto débil” del jugador que hoy milita en el Barcelona de España, y que en diferentes ocasiones ha protagonizado escándalos por fuera de las canchas, donde se le encontraba en un estado de ebriedad y hasta con la pérdida del sentido.
Sin embargo, tanto la Selección Chilena como sus diferentes clubes nunca quisieron tocar las mencionadas controversias de Vidal, por lo que dejaban entender que se podría tratar de una especie de revuelo creado por los medios de comunicación, pero las dudas regresan a los fanáticos del balompié cuando Georgio habla de este tema, sosteniendo que Arturo fue a muchos entrenamiento “borracho y no veía la pelota”.
Uno de los testimonios que el defensor toca para dar a entender lo que está relatando, es uno que se vivió en Miami, en una pretemporada de la Juventus, poco antes de que la misma se fuera a terminar, dejando ver que aunque se conocía del estado de Vidal, el mismo entrenador decidió no decir nada.
“Arturo estaba en la cama y tuvieron que levantarlo a la fuerza. Conte pensaba darle un castigo ejemplar porque se imaginaba que en ese estado no iba a rendir. Llevábamos diez minutos de entrenamiento y Arturo todavía parecía borracho y ni siquiera veía pasar la pelota. Pero al terminar la sesión… corría como un loco. Así que el técnico dijo: ¿Qué puedo decirle a esa persona, que entre otras cosas trae alegría al grupo?”, señaló Chiellini.
Ahora bien, al final de su intervención, Chiellini opinó por última ocasión sobre la situación de su excompañero, asegurando que “las debilidades son parte de la naturaleza”, señalando que este tipo de flaquezas no hacen de Arturo “un demonio o un santo”, y que tampoco podrían permitir que se discuta la calidad del chileno como persona.
