El presidente Juan Manuel Santos, reivindica los acuerdos de paz que su Gobierno firmó con la guerrilla de las Farc como la única solución posible, pese a ser duramente criticado por la oposición, que lo acusa de proporcionar impunidad a los violentos.
“La paz siempre tiene un precio, pero en nuestro caso es muy pequeño en comparación con los beneficios”, afirma el presidente de Colombia en una entrevista con el diario español El Mundo.
El mandatario colombiano reconoce que “el precio” es la llamada Justicia transicional, que suaviza las penas y reduce las exigencias para evitar la cárcel de los guerrilleros acusados de crímenes, pero insiste en que “no habrá impunidad”.
“La dificultad de estos procesos es saber dónde trazar la línea entre justicia y paz. Unos quieren más justicia, otros quieren más paz”, reflexiona Santos.
Ante la pregunta de si no había otra solución que negociar, Santos, que fue ministro de Defensa y combatió a la guerrilla con las armas, afirma que “no era posible derrotar a las FARC. Aniquilarlas de la faz de la tierra”.
“La opción de exterminar hasta el último guerrillero -que es lo que algunos hubieran querido- era imposible. Militarmente absurdo”, concluye.
El presidente, en la recta final de su mandato, insiste en que las víctimas, en su mayoría “han apoyado el proceso” de paz.
El próximo mes de agosto, Colombia tendrá elecciones presidenciales, no obstante, Santos considera que el próximo mandatario “tendrá que seguir cumpliendo los acuerdos”. “Hemos fijado un plazo de quince años para esta tarea y ningún presidente podrá rehuirla”. Efe