Las redes sociales están desplazando al correo electrónico como principal vía de los “hackers” para el robo de datos, según un informe divulgado en Bogotá, que detalla que uno de cada 10 usuarios admite haber sido víctima de un ciberataque en comunidades como Facebook o LinkedIn.
El documento El Pulso del Cibercrimen de 2017, de la firma estadounidense Easy Solutions, cuya oficina global de Investigación y Desarrollo está situada en el territorio colombiano, señala que, “Las redes sociales presentan una gran oportunidad para los cibercriminales ya que ofrecen una falsa sensación de seguridad y los usuarios son más confiados a la hora de compartir información personal”.
El estudio de esta empresa de ciberseguridad, basado en el monitoreo de unas 30.000 millones conexiones, indica que “más de una cuarta parte de los usuarios de redes sociales acepta solicitudes de amistad sin realizar ningún tipo de verificación previa”, lo que ha disparado el riesgo de ataques.
A esto se suma el atractivo número de víctimas potenciales, ya que se estima que en 2016 unos 2.340 millones de personas contaban con perfiles en comunidades de internet.
De acuerdo con los autores del reporte, el ataque que ha tomado más fuerza en las redes es el “phishing”, modalidad que aumentó un 65 % en el último año y que consiste en el envío de mensajes que aparentan provenir de fuentes confiables, como bancos o aerolíneas, para obtener datos confidenciales y usarlos para un fraude.
“Hay unas defensas bajas en las redes sociales”, sostuvo a Efe la argentina María Lobato, una de las autoras del informe, al explicar que los datos permitieron detectar el uso cada vez más extendido de la “ingeniería social” por parte de los criminales para aprovecharse de “la curiosidad” de los usuarios, reporta Efe.
El documento plantea como ejemplo un experimento en el que se enviaron mensajes “phishing” a través de correo electrónico y de Facebook a 1.255 estudiantes universitarios, con un enlace supuestamente a un álbum de fotografías.