La comunidad corre riesgo de una posible afectación a sus derechos ya que no tienen acceso a salud, alimentación ni educación
Este martes la Procuraduría General de la Nación manifestó sus deseos de que 27 miembros de la comunidad indígena Emberá Chamí que permanecen en malas condiciones en el municipio de Campoalegre ubicado en el centro del departamento de Huila, sean trasladadas a un albergue transitorio de Pitalito.
En busca de mitigar la condición de vulnerabilidad hacia esta población, la entidad se dirigió al Ministerio del Interior y a la Unidad para la Atención y Reparación Integral de Víctimas, UARIV, para solicitarles aceleren los trámites correspondientes y así sea posible dirigir a la comunidad a un nuevo hogar.
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Dicha acción sería de manera preventiva, teniendo en cuenta que los afectados no tienen acceso a salud, alimentación ni educación y desde finales del mes de junio permanecen en una casa donde solo les proveen los servicios básicos de agua, luz y gas.
Estos no serían los únicos factores que estarían violando sus derechos, ya que la falta de garantías en seguridad también los rodea, ante lo cual el Ministerio Público pidió a la Unidad Nacional de Protección (UNP) y a la Policía Nacional “activar las rutas y programas de protección y prevención que se requieran para garantizar su seguridad, debido a que el pasado 16 de junio fue asesinado uno de sus integrantes y otro más fue herido”.
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No solo con ello requirió a la Gobernación del Huila comenzar con los procesos que contribuyan a mejorar las condiciones de alimentación dirigida a la comunidad que está conformada por siete familias.
