Para el próximo 20 de julio, Día de la Independencia, hay programadas varias movilizaciones en todo el país para seguir protestando en contra del Gobierno de Iván Duque. Sin embargo, el foco principal estará en Bogotá, pues varios grupos de la Primera Línea han anunciado que se desplazarán hasta la ciudad para participar en las protestas.
Esta situación ha puesto en alerta a las autoridades, ya que creen que la presencia de estos grupos pueden generar hechos de violencia y enfrentamientos contra la fuerza pública. Por ello, el comandante de la Policía de Bogotá, Jorge Eliecer Camacho, informó que realizarán 10 puestos de control en las principales entradas de la capital para decomisar elementos que, según la institución, pueden ser usados para vandalismo.
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““La persona que trata de ingresar con unos cascos, con unos escudos, con caucheras, con botellas o combustibles pues no viene con las mejores intenciones, ese es el objetivo de esta actividad que estamos haciendo e igualmente nuestra inteligencia esta en la misma ruta de detectar esto antes del 20 de julio”, señaló el oficial.
Este anuncio de la Policía ha generado gran controversia en diferentes sectores sociales, algunas bancadas del Concejo de Bogotá han rechazado la iniciativa de la Policía argumentando que los elementos son utilizados por los jóvenes para su protección, teniendo en cuenta los casos de abusos policiales que se han presentado en medio de las manifestaciones.
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“Que van a incautar cascos y gafas por Dios, qué daño se hace con un casco y unas gafas, yo estoy en desacuerdo con la violencia pero creo que los jóvenes tienen que protegerse también”, aseguró la concejal Ana Teresa Bernal.
Según información recolectada por las autoridades, varios grupos ilegales estarían financiando a personas para que alteren el orden público en medio de las manifestaciones, por lo que en diferentes partes del país se han ofreciendo recompensas por información que permitan la captura de aquellos que cometan hechos vandálicos.
