El primer mandatario de Filipinas, Rodrigo Duterte, reconoció que en su etapa de adolescencia estuvo relacionado con un hecho de agresión sexual, confesión que ha causado revuelo en todo el país.
El Presidente señaló que en una edad joven, agredió sexualmente a una empleada doméstica, pues en varias ocasiones habría ingresado a su habitación para intentar abusar de ella, tocándola mientras ésta permanecía dormida.
Luego de las sorpresivas declaraciones, varios partidos políticos mostraron su preocupación e indignación y pidieron que el jefe de Estado presente su renuncia, esto con el fin de proteger y defender los derechos de las mujeres.
Además, las mujeres de este país han acusado a Duterte de hacer apología a las agresiones sexuales, ya que cada vez que en alguna intervención pública hace bromas con temas como violación e infidelidades, lo cual ha generado varios escándalos durante su mandato.