El colombiano Nairo Quintana restó importancia a la caída que sufrió este miércoles a 30 kilómetros de meta, que no tuvo consecuencias en la general, y señaló que este jueves podrá tomar la salida sin ninguna secuela.
“Veníamos con un poco de tensión en la zona de cambios de dirección y de carreteras estrechas y ha ocurrido lo normal, que hay caídas. He podido frenar un poco cuando he visto la caída, pero ha sido inevitable”, señaló el corredor del Movistar.
“Estoy bien y eso es lo importante: que las fuerzas están bien. Rápidamente el equipo se juntó y fuimos tirando poco a poco junto al equipo de Richie Porte, también involucrado en la caída”, agregó.
“Yo estoy bien, ahora toca ponerse algo de hielo en el codo, que es lo único que se raspó en la caída, y mañana debería estar sin problemas”, indicó el colombiano.
Quintana aseguró que pasó una buena jornada de descanso junto a su familia “tomando aire para los días clave del Tour”.
“Mañana empiezan los exámenes más fuertes para nosotros, donde queremos estar siempre delante y empezar a recuperar el tiempo perdido”, afirmó.
“Tenemos a Mikel (Landa) en buena posición para jugar estratégicamente y tanto él como Alejandro (Valverde) y el resto del equipo estamos bien”, analizó.
Además, se ha conocido en las últimas horas que el penalista boyacense estudiaría su cambio de escuadra para la próxima temporada, después de que se murmurara que no va a renovar con su actual equipo el Movistar Team.
Medios de Europa, hablan de que el Arkea-Samsic de origen francés sería el nuevo destino de Quintana, con un contrato económico que oscila entre los 2.5 millones de dólares para el colombiano.
Escrita por redacción digital y Efe.