Foto: Suministrada
Por años, los mineros artesanales del Bajo Cauca han vivido con el estigma de la ilegalidad. Además, los bajos niveles de formación y las difíciles condiciones socioeconómicas también obstaculizan el acceso de los mineros al sistema financiero formal.
Ante ese panorama, Confiar Cooperativa Financiera y la plataforma tecnológica Mintrace Colombia S.A.S. se unieron para brindar una alternativa de inclusión financiera y de formalización a la actividad de los mineros, a través de la estrategia Trazoro.
El modelo desarrollado por Trazoro identifica a los mineros de subsistencia, o barequeros, y los vincula a una plataforma de comercialización a través de la tecnología biométrica. Así, cruza sus datos con los de la Registraduría Nacional del Estado Civil y el RUCOM (Registro Único de Comercializadores de Minerales). Los procesos de comercialización y de registro se desarrollan con tecnologías como Blockchain, IoT y Big Data, para asegurar la trazabilidad y seguridad de cada operación.
Luego del registro y la validación de datos, los mineros pueden abrir sus cuentas de ahorros en Confiar, en las que posteriormente Trazoro deposita el dinero del oro comercializado. “El aplicativo desarrollado nos permite certificar, en asocio con las alcaldías, la calidad de estos mineros artesanales para que puedan hacer parte del sistema financiero formal, y ofrecerles desde la cooperativa servicios de ahorro y crédito”, explicó Oswaldo León Gómez, líder de la plataforma solidaria.
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Alternativas que promueven la legalidad
Además de promover la inclusión financiera, esta alianza servirá para controlar la procedencia del oro. Como aseguró Juan Carlos Henao, cofundador de Trazoro, “el sistema permite identificar a las personas, generar la documentación y conectarse con las diferentes autoridades y actores de manera digital, para que exista una verdadera trazabilidad”.
Durante la primera fase se espera vincular a 75 mineros de subsistencia, o barequeros, de un total de 3.000 en el Bajo Cauca. Uno de los beneficiados por esta iniciativa es Yeison Manuel Palencia, quien desde hace 8 años trabaja como minero artesanal en el municipio de Caucasia. Hoy tiene 26 años y nunca había accedido a una entidad financiera. Yeison.
Las condiciones de riesgo asociadas a la población minera del Bajo Cauca logran ocultar el aporte positivo de esta actividad a la economía de la región y del país. Como consecuencia, los bancos les cierran las puertas a los mineros.