Foto: Archivo
Un juez de Barranquilla decidió impartirle una medida no privativa de la libertad al presunto responsable de las amenazas de las que fue víctima el médico intensivista José Buelvas, Candelario del Cristo Rómulo Bravo, pese a que el togado haya considerado que dichos amedrantamientos, sí se habían desarrollado en contra del ejercicio de la profesión del galeno.
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Uno de los casos que más polémica generó en todo el país, dentro de las múltiples amenazas y actos de discriminación que se han presentado en contra del personal de la salud en las últimas semanas, ha sido el del médico Buelvas, debido a que él mismo denunció con las coronas fúnebres que llegaron hasta su residencia, que estaba siendo víctima de amenazas.
Del mismo modo, el juez tercero le recordó a Bravo que no podrá salir del país, ni comunicarse con las víctimas en dicho proceso, siendo el médico Buelvas y sus familiares, por lo menos mientras se desarrolla la investigación y el juicio penal, que según el fiscal encargado, deberá enfrentarse a delitos de amenaza, debido al envío de notas y coronas fúnebres.
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Adicional a la presunta relación de las amenazas con temas sentimentales que manejaba la defensa del galeno, desde la Policía de la capital del Atlántico se determinó que no habría caso alguno con esta hipótesis, que se consideró como presunto móvil debido a que la pareja sentimental del presunto responsable, habría trabajado con Buelvas.
