El británico Jac Holmes, que estaba en Siria desde 2015 luchando con las milicias kurdas contra el Estado Islámico (EI), ha muerto mientras quitaba minas en la localidad de Raqqa, informa la BBC.
La cadena pública del Reino Unido ha conocido su fallecimiento por fuentes vinculadas a la milicia kurda YPG, a la que se afilió este exinformático de 24 años, procedente de la ciudad inglesa de Bournemouth.
La madre del miliciano, que al parecer formaba parte de un grupo de cuatro tiradores de España, Alemania y Estados Unidos y aparecía frecuentemente en los medios de comunicación locales, ha dicho a la BBC que para ella su hijo era “un héroe”.
“Le encantaba lo que estaba haciendo allí, ser un soldado. Tenía el coraje de sus convicciones”, que le llevaban a querer luchar contra los extremistas del EI, ha declarado Angie Blannin, reporta Efe.
Blannin explicó que su hijo, que respondía al nombre kurdo de guerra Sores Amanos, se marchó de Inglaterra cuando era muy joven y estaba “algo perdido”, pero en el frente descubrió algo “que se le daba bien” y sentía que estaba “haciendo historia”.