Varios miles de personas participaron en un mitin de protesta contra la prohibición del servicio de mensajería Telegram, que se negó a entregar a las autoridades las claves para descifrar los mensajes de sus usuarios.
“Exigimos que las autoridades pidan perdón a los usuarios de Telegram y a todos los usuarios de internet por el caos creado”, dijo Emilia Slabunova, líder del partido liberal Yábloko, desde la tribuna.
El mitin “Por la libertad de internet”, el segundo que se celebra en la capital rusa en las últimas dos semanas, congregó en la Avenida Sájarov a numerosos líderes de la oposición extraparlamentaria.
El ex primer ministro, Mijaíl Kasiánov, fue más allá y propuso recurrir al Tribunal Constitucional para que revoque la decisión de prohibir Telegram, servicio creado por Pável Dúrov, considerado el gurú de las altas tecnologías en Rusia y que está exiliado en Londres.
Otras demandas que se presentaron en el mitin fue la liberación de aquellas personas que cumplen condenas de cárcel por supuestos mensajes extremistas en las redes sociales.
La policía detuvo a varias decenas de activistas de izquierda y de organizaciones anarquistas, según denunció el opositor Serguéi Udaltsov, líder del Frente de Izquierdas, por ondear pancartas con lemas que no se respondían con el motivo del mitin.
Todas estos actos de protesta han sido apoyados desde la distancia por Dúrov, propietario de Telegram y fundador de VKontakte, la versión rusa de Facebook.
El regulador ruso de las comunicaciones, Roskomnadzor, ha bloqueado decenas de millones de direcciones IP con el objetivo de impedir el funcionamiento de Telegram, en cumplimiento de una sentencia judicial que ha prohibido el servicio de mensajería.
En su empeño de hacer caer todos las direcciones IP en las que se refugia Telegram para evitar su bloqueo, Roskomnadzor ha perjudicado a millones de usuarios y a decenas de grandes compañías de internet como Google, Apple y Amazon.
Los internautas rusos se quejan desde hace semanas de problemas para acceder y usar con normalidad la web de Amazon, servicios de Google como Youtube, Gmail, Google Play y Google Drive, y la tienda digital de aplicaciones AppStore de Apple, entre muchos otros, informa Efe.
Pero pese a todos los esfuerzos de las autoridades rusas, Telegram sigue funcionando en todo el país, como dejó de manifiesto hoy el líder checheno, Ramzán Kadírov, que utilizó ese medio para hacer una declaración pública.
