Los campesinos son “actores políticos”, no solo víctimas: Comisionada de la verdad

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La Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad en Colombia realiza su cuarto Encuentro por la Verdad en la población de Cabrera, en el departamento de Cundinamarca, este jueves 12 y viernes 13 de diciembre. Este municipio, ubicado en pleno corazón del Sumapaz y en zona de reserva campesina, es un lugar simbólico de la resistencia rural en el país.

Esta región fue epicentro de una de las guerras más feroces antes del nacimiento de la extinta guerrilla de las Farc, en la que el campesinado liderado por Juan de la Cruz Varela hizo frente a la policía ‘chulativa’ (grupo armado ilegal que perseguía a los opositores del gobierno conservador de Laureano Gómez) durante un periodo conocido como La Violencia. Así mismo, su población resistió a la ofensiva que emprendió el presidente Gustavo Rojas Pinilla contra la resistencia campesina en la década del 50.

El acto contará con testimonios de personas de todo el país que han sido víctimas del desplazamiento forzado, del despojo de tierras, la colonización de las tierras fuera de la frontera agrícola y la persecución política.

De acuerdo con la comisionada Marta Ruiz, en este cuarto encuentro se espera ahondar en cómo la población campesina y las autodefensas campesinas se fueron involucrando en el tema del conflicto y en el surgimiento de las Farc.

Lo que se pretende, según la comisionada, es a partir de los testimonios mostrar cómo ha sido la vida de los campesinos en medio del conflicto y cómo este se interrelaciona con la lucha por la tierra.

“Vamos a reconocer tres cosas que tienen que ver con los impactos del conflicto en los campesinos: uno, el desplazamiento y el despojo; dos, la estigmatización, porque los campesinos han sido señalados muy frecuentemente de comunistas, guerrilleros, etc; y tres, a sus resistencias y luchas por el territorio, la tierra, en fin…”, aseguró Ruiz.

Otro objetivo importante del encuentro será reconocer al campesinado como sujeto político y no solo como víctima de un conflicto armado, algo legítimo en materia de reparación. Según indicó la comisionada Marta Ruiz, “los campesinos son interlocutores de la sociedad en la construcción de Estado, de país, de política”.

“Después de la violencia del 48, muchas organizaciones campesinas mantuvieron la defensa de la tierra, pero no como un problema que les den un pedazo de tierra, sino de cómo se concibe el país y el desarrollo del mismo. Ellos tienen algo que decirle al país sobre lo que es el desarrollo”, afirmó.

Junto con el papel que representó la zona del Sumapaz en la guerra, sobretodo en su origen, el evento cobra importancia porque la población campesina es el sector que más ha sufrido por la guerra en Colombia.

Según el Registro Único de Víctimas, de los 8,6 millones de desplazados forzados en Colombia, el 87% son personas de zonas rurales y el 86% de estas, aproximadamente 6 millones de individuos, son de origen campesino. Es decir, el 87% de las víctimas de la guerra en el país son campesinos. 

Este jueves habrá una jornada de encuentro entre los asistentes para que puedan tener un diálogo entre diferentes organizaciones, la cual se cerrará con un acto simbólico en la plaza principal de Cabrera, donde hay un monumento a Juan de la Cruz Varela. Y el viernes se realizará una ceremonia testimonial, en la que hablarán campesinos que fueron víctimas desde de los bombardeos de Villa Rica, Tolima, en 1953, hasta la actualidad.

Ruiz afirma que históricamente hay otro problema muy profundo y que se mantiene, que tiene que ver con la representación e inclusión política, pues hay muchos territorios que nunca han estado representados políticamente, o que si lo han estado, dicha representación ha recaído en los terratenientes.

Por ello, hizo mención de uno de los compromisos del acuerdo de paz firmado en 2016 y señala que “las 16 curules que se pactaron en La Habana (y que no fueron aprobadas por el Congreso) no eran inicialmente para las víctimas, sino para los territorios afectados por la violencia”.

Y añade: “Las organizaciones campesinas no son organizaciones de mendigos, sino de gente que tiene propuestas de país”.