La alcaldesa de Bogotá, Claudia López, instó a los organizadores de las marchas que están programadas para el próximo 28 de abril que prioricen el cuidado a la vida y detalló que hay muchas maneras distintas de protestar.
“Los organizadores bien pueden hacer plantones virtuales, bien pueden hacer cacerolazos, pero las marchas o aglomeraciones son en este momento un atentado a la vida”, dijo la alcaldesa.
Pese a que la mandataria reconoció que la protesta social es un derecho constitucional y que sus causas son legítimas, López subrayó que en este tercer pico de la pandemia de la COVID-19 que se vive en Colombia no se pueden arriesgar la vida y los empleos.
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“Los dirigentes sociales y políticos que están en campaña también son parte de esta ciudad y esta sociedad y no pueden incrementar un riesgo sino ayudar a mitigarlo”, expresó.
Para el próximo 28 de abril hay convocado un paro nacional por parte de diferentes sectores gremiales para rechazar la reforma tributaria presentada por el Gobierno.
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En este plano, López afirmó que las próximas dos semanas serán las más duras no solo de la pandemia “sino de nuestras vidas”.
“Nunca hemos estado más al filo de la navaja como estás dos semanas, pero estoy segura que con la conciencia, con la cultura ciudadana, con el esfuerzo de cuidado colectivo que Bogotá ha demostrado que es capaz de hacer, con el profesionalismo de todo nuestro sistema de atención en salud, con su dedicación y sacrificio, al igual que el de los diferentes sectores productivos y sociales, lo vamos a lograr”, manifestó la alcaldesa.
Hasta la fecha, Bogotá suma 766.778 casos positivos de coronavirus, lo que convierte a la capital en el epicentro de la pandemia en Colombia.