El ministro británico de Exteriores, Boris Johnson, considera que hay “una relación directa” entre el apoyo que el presidente ruso, Vladímir Putin, da al régimen sirio y el envenenamiento del exespía Serguéi Skripal en el sur Inglaterra, que atribuye a Moscú.
En un artículo publicado hoy por el diario francés “Le Parisien”, Johnson afirma que el envenenamiento de Skripal y de su hija en la ciudad de Salisbury -que se encuentran en estado crítico- es “una manifestación suplementaria del comportamiento peligroso del presidente Vladímir Putin”.
A su juicio, hay “una relación directa entre la indulgencia manifestada por Putin con las atrocidades perpetradas por (Bachar al) Asad en Siria y el hecho de que el Estado ruso no haya dudado en emplear un arma química en territorio británico”, reporta Efe.
El jefe de la diplomacia británica no tiene dudas de la autoría del ataque contra el exespía, sobre todo después de que el Kremlin no diera una respuesta cuando pidió al embajador ruso que aclarara si tenían constancia de la desaparición de muestras del agente neurotóxico utilizado, el Novichok.