El Laboratorio de Innovación Ciudadana por la Paz empieza en Pasto con la intención de que decenas de personas de doce países diseñen diez soluciones innovadoras a problemas de la comunidad de la zona, especialmente azotada por el conflicto.
El Laboratorio vuelve a reunirse tras las tres ediciones anteriores, celebradas en Veracruz (México) en 2014, en Río de Janeiro en 2015 y en Cartagena de Indias en 2016, de las que salieron resultados como la aplicación Aetrapp para facilitar el control del Aedes Aegipty, el mosquito que transmite el zika y la malaria.
Organizado por la Secretaría General Iberoamericana (Segib), junto a la Alta Consejería para el Posconflicto de Colombia y la Gobernación de Nariño, el Laboratorio durará doce días, tiempo en el que buscarán resolver problemáticas sociales de manera colaborativa, utilizando la tecnología como vía para democratizar esas soluciones.
Ciudadanos de Colombia, México, Ecuador, España, Argentina, Italia, Brasil, Venezuela, Honduras, Portugal, Panamá y Uruguay desarrollarán diez proyectos vinculados a los ámbitos prioritarios del posconflicto en Colombia: derechos humanos, convivencia, desarrollo local alternativo, cultura de paz y reconciliación, reporta Efe.
Dichos proyectos van desde la fabricación de prótesis en 3D para víctimas de minas anti persona a la creación de un libro con testimonios de mujeres afrodescendientes, el diseño de biodigestores para convertir los excrementos de los animales en energía renovable o la captura del agua de la niebla para su consumo.
El alto consejero para el Posconflicto del gobierno de Colombia, Rafael Pardo, anunció también la llegada del laboratorio a Nariño donde los ciudadanos serán “protagonistas”, según afirmó en Twitter.
