La Agencia Espacial Europea (ESA) anunció la puesta en marcha de un estudio sobre cómo reciclar y reutilizar oxígeno en el espacio, dado que los vuelos espaciales del futuro se espera que sean autosuficientes y que no necesiten recurrir a naves de reabastecimiento.
El experimento, que según la ESA “está a punto de comenzar”, analizará cómo tiene lugar la fotosíntesis en el espacio, para lo que utilizan la microalga Arthrospira, conocida como espirulina, metida en un fotobiorreactor, una especie de cilindro bañado en luz.
La agencia detalló que en la Estación Espacial Internacional (EEI) el dióxido de carbono se transformará mediante la fotosíntesis en oxígeno y biomasa consumible, como proteínas.
“Aunque en la Tierra este es un proceso rutinario, tenemos que comprender cómo funciona en el espacio antes de poder explotarlo. El experimento se desarrollará durante un mes, mientras se mide con precisión la cantidad de oxígeno que producen las algas”, señaló en su nota.
Las microalgas se analizarán en cuanto la nave de carga estadounidense Dragon vuelva a la Tierra en abril con el objetivo de “obtener una imagen más clara de los efectos de la ingravidez y la radiación en las células de estas plantas”.
“Se sabe que la Arthrospira es muy resistente a la radiación, pero tenemos que comprobar hasta qué punto tolera las contingencias del espacio”, añadió la ESA, según la cual este proyecto, bautizado como Artemiss, es el primero de su tipo.
Los investigadores confían en proseguir su desarrollo “con un estudio mayor que alimente microalgas de forma continua”. Efe