La exministra de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC), Karen Abudinen, declaró en calidad de testigo ante la Procuraduría en medio del juicio disciplinario se lleva en contra de algunos de sus exfuncionarios por el escándalo de corrupción que tiene a la UT Centros Poblados como principal culpable y en el que se perdieron 70 mil millones de pesos.
En la diligencia, Abudinen explicó que la celebración del contrato se realizó de acuerdo a lo estipulado en la ley y tras el estudio de las propuestas que se manejaban. La exfuncionaria resaltó que se siguió el conducto regular y se llegó a la conclusión de que Centros Poblados era la única compañía que tenía todo en regla y cumplía con los documentos.
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En ese sentido, la exministra aseguró que tanto ella como sus funcionarios tomaron las respectivas acciones para intentar parar la “fabrica de corrupción”, una vez se percataron de los sucedido.
“Hay una fábrica de corrupción alrededor. Yo si le pido señor procurador, que las empresas de Centros Poblados que engañaron al Estado por muchísimos años salgan de la contratación de este país. Cambian de nombre, cambian de fachada (…) No tenemos cómo saber el pasado de las empresas. los funcionarios públicos no debemos seguir siendo engañados”, expresó.
Abudinen precisó que el proyecto, con el cual se buscaba llevar internet a las zonas rurales, respondía a los pedidos realizados por el presidente Iván Duque cuando ella se posesionó como jefe de esta cartera y lo calificó como el “más ambicioso” con el que se quería beneficiar a estudiantes para que mejoraran la calidad de la educación que reciben.
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Asimismo, enfatizó que durante el trámite del contrato no se recibió ninguna alerta por parte de algún ciudadano o sus subalternos, de quienes destacó su compromiso, facultades y transparencia para estar en el cargo que cada uno ejercía. Además, señaló que siempre actuaron “en derecho y con el debido proceso”, incluso, después de que se destapara el escándalo, pues le dieron la oportunidad a Centros Poblados de defenderse frente a las acusaciones.
“Me siento engañada y siento que a mis funcionarios también los engañaron. Yo desconfiaba hasta de mi mano izquierda y mi mano derecha, Hoy que ya estoy más reposada le quiero decir que nos sentimos engañados. Mi carrera tenía una proyección importantes”, manifestó.
Por último, la exministra afirmó que esta ha sido una de las “situaciones más difíciles” que ha tenido que vivir desde el punto de vista humano.
