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La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) a través de su Sala de Reconocimiento de la Verdad llamó al excomandante del Ejército Nacional, general (r) Mario Montoya Uribe para que declare ante este tribunal su testimonio frente a la certificación por parte de 11 militares con respecto a los casos de ejecuciones extrajudiciales, más conocidos “falsos positivos”.
Con respecto al caso 003 que se adelanta en la JEP fue citado para el próximo febrero de 2020 al oficial en retiro debido a que miembros del Ejército declararon que a través de órdenes fue que realizaron el crimen de asesinato a ciudadanos, que hicieron pasar por bajas en combate para que se pudieran subir los registros de los resultados operacionales.
Según las autoridades, quienes fueron víctimas de estos crímenes serían jóvenes que se capturaban en el municipio de Soacha, cercano a Bogotá, para que pudieran ser enviados a diferentes zonas rurales de Norte de Santander, uniformarlos para que aparentaran ser actores del conflicto y simular un batalla de la que posteriormente resultarían asesinarlos.
En la diligencia que se hará el próximo año, el general tendrá la posibilidad de conocer las declaraciones tanto de los once militares que mencionaron que él era quien ordenaba que estos crímenes se cometieran, como las palabras de las víctimas indirectas de estos “falsos positivos”, es decir, los familiares; por otra parte, uno de los testimonios que también tuvo en cuenta el tribunal fue el del coronel (r) Gabriel de Jesús Rincón Amado, quien decidió someterse a la JEP en 2018.
“Exigían era muertes en combate, y como lo manifestaba en sus programas el comandante del Ejército, eran litros de sangre, tanques de sangre”, aseguró el coronel con respecto a este caso.
