En horas de la mañana de este miércoles 7 de julio, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) entregó su informe sobre la vulneración de los Derechos Humanos en medio de las manifestaciones en Colombia, realizadas por el paro nacional.
En el mismo, la organización le hizo una serie de recomendaciones al Estado colombiano para manejar la protesta social y evitar así hechos de violencia por parte de funcionarios públicos, principalmente Policías y uniformados del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD).
El informe desató un gran debate entre los sectores que estuvieron de acuerdo con las palabras de la CIDH y los que no, incluido el presidente Iván Duque, que desestimó algunas recomendaciones.
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Pero muy a diferencia del jefe de Estado, el Centro Democrático, partido de gobierno, criticó fuertemente a la CIDH y la señaló de tener un gran “sesgo ideológico” para beneficiar a la izquierda.
“Como era de esperarse, el informe refleja el sesgo ideológico que caracteriza y afecta múltiples actuaciones y documentos de esa organización. En este caso es claro el afán por replicar la narrativa de la izquierda de mostrar al Estado colombiano como opresor y como víctimas a quienes destruyeron redes de transporte, propiedad pública y atacaron con sevicia a miembros de la fuerza pública”, señaló el partido.
En otro de los apartes del comunicado, la colectividad política asegura que “el 89% de las manifestaciones” se realizaron de forma pacífica, pero en el resto se registraron actos de “delincuencia y terrorismo”, razón por la cual era necesaria la respuesta de la fuerza pública.
El Centro Democrático critica que la CIDH no haya condenado los bloqueos, argumentando que legalmente estos no hacen parte de la protesta social, pues ocasionan “enormes daños a personas y comunidades” que se transforman en “afectación y quiebra de negocios“, entre otras consecuencias.
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“Consideramos inapropiado que la CIDH recomiende tolerancia con la violencia, pasando por alto las pruebas de los informes de inteligencia que evidenciaron la infiltración de la protesta por Grupos Armados Organizados y terroristas”, agregan.
Por último, el partido del uribismo cuestiona que la organización recomendara una eventual reforma a la Policía, señalando que esta es una de las “más profesionales del mundo y de los que acumulan mayores resultados en la lucha contra la criminalidad”.
Además, desmienten que en las manifestaciones se hayan presentado hechos de violencia basados en género, en contra de periodistas y de las misiones médicas, manifestando que esto “no corresponde a la verdad” y que lo único que se busca es “atizar el discurso de la izquierda radical” de Colombia.
