Las autoridades indonesias indicaron este viernes que esperan la llegada de dos barcos, uno de ellos chino, con el objetivo de estudiar la posible misión de rescate del submarino hundido la semana pasada con 53 tripulantes a bordo.
Las autoridades estudian la complicada operación para emerger los restos de la nave, que se rompió en tres piezas y se encuentra a una profundidad de 800 metros bajo el nivel del mar, y todavía no han confirmado de que se vaya a llevar a cabo.
El jefe de la Marina, Yudo Margono, indicó hoy a los medios locales que esperan la llegada de ayuda, en especial el citado barco chino que cuenta con un dispositivo magnético de alta potencia y globos submarinos que podrían ser utilizados en la misión.
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El indonesio, no obstante, evitó pronunciarse sobre un calendario específico para iniciar el operativo.
Las autoridades creen que los cuerpos sin vida de los 53 tripulantes del submarino Nanggala-402 se encuentran atrapados dentro de los restos de la nave.
Los familiares de los marinos fallecidos participaron este viernes en una ceremonia de recuerdo en la que arrojaron flores al mar en el punto donde el submarino inició la inmersión por última vez.
El submarino, un modelo Cakra-class fabricado en Alemania en 1978 y entregado a Indonesia tres años más tarde, desapareció unos 40 minutos después de sumergirse en la madrugada del miércoles de la semana pasada durante unas maniobras militares.
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El Nanggala-402, que fue reformado en 2012, fue localizado el domingo por un submarino singapurense que participaba en el amplio dispositivo de búsqueda en el que también se implicaron Australia, la India y Estados Unidos.
Indonesia descarta que el accidente se produjera por un error humano y sospecha que comenzó a sufrir grietas cuando se encontraba a entre 400 y 500 metros bajo la superficie, alrededor del doble de profundidad que su capacidad de inmersión, tras ser arrastrado por una ola submarina, según las primeras hipótesis.
Las autoridades informaron el martes que han recuperado el hidrófono, una parte del submarino que puede ayudar a conocer los motivos del accidente. EFE
