Un equipo de científicos ha identificado el grupo de genes que determina por qué los seres vivos duermen más o menos, lo que podría resultar determinante para hallar tratamientos para aliviar desórdenes del sueño, tales como el insomnio y la narcolepsia, según un estudio divulgado en EE.UU.
La investigación, publicada por la revista PLOS Genetics y elaborada con un grupo de moscas de la fruta, permitió a los investigadores determinar los genes que establecen la necesidad de dormir, que son los mismos que el organismo emplea para otras funciones, como el desarrollo de la memoria y del aprendizaje.
“Este estudio es un paso importante hacia la resolución de uno de los grandes misterios de la biología: el porqué es importante dormir”, señaló la responsable del estudio, Susan Harbison, doctora del Instituto Nacional del Corazón, el Pulmón y la Sangre (NHLBI), institución responsable de la investigación junto a los también estadounidenses Institutos Nacionales de Salud (NIH).
Para llevar a cabo el estudio, el equipo desarrolló hasta 13 generaciones de la mosca de la fruta con el objetivo de conseguir insectos que bien durmieran hasta 18 horas al días o apenas 3.
Gracias a estos dos grupos de control, los científicos pudieron comparar los datos genéticos que diferenciaban a ambos, lo que les permitió identificar hasta 126 disparidades en los distintos genes implicados en el proceso del sueño.
Hasta la fecha, apuntó Harbison, la comunidad científica era consciente de que el mapa genético tenía un papel clave en los patrones del sueño, pero no se habían podido determinar con exactitud qué genes participaban en el proceso, reporta Efe.
“Conocer el papel desempeñado en el sueño por procesos biológicos notablemente diferentes puede ayudar a explicar por qué el propósito del sueño ha sido tan escurridizo”, agregó la experta.