Nala Ray, una joven de 23 años proveniente Illinois, Estados Unidos, se ha vuelto una sensación en Onlyfans por las sensuales fotos que publica, sin embargo, la mujer reveló que antes de dedicarse a esta actividad su familia, principalmente su padre que es pastor, siempre le inculcaron la religión, aunque a ella no le agradaba esto.
En una entrevista con el diario The Mirror, la joven relató que ella aprovechaba cuando sus padres se descuidaban, incluso mentía asegurando que se encontraba en algún grupo de la iglesia, para poder verse con jóvenes ya que le gusta sentirse “amada” y “deseada”.
“No me escapaba para beber o salir de fiesta, solo quería ser amada y apreciada sexualmente (…) Estábamos en el centro del enfoque de la ciudad. Fue difícil. No me permitían usar maquillaje o ropa provocativa y la comunidad tampoco aprobaba las redes sociales ni las citas”, dijo.
Ray señaló que sus padres eran muy protectores, la única libertad que tenía era poder trabajar en un restaurante de un centro comercial, lugar que para ella era un “santuario” y todo se dio gracias a que su familia aceptó que ella debía empezar a ganar su propio dinero.
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“El centro comercial para mí era un santuario total. Me encantaba ver a toda la gente coqueteando, en citas y vestida con faldas cortas y blusas ajustadas (…) Era tan obvia con mi sexualidad. Incluso entonces, como hija de un pastor de 16 años, sabía que el trabajo sexual sería mi vocación”, manifestó la mujer.
La joven asegura que nació para ser una “criatura sexual”, por lo que a los 18 años decidió dejar la universidad y empezó a subir fotos en Instagram, precisamente fue en esta red social donde surgió la idea de abrir Onlyfans, gracias a que uno de sus seguidores se lo recomendó.
En su primer mes en la plataforma para adultos Nala ganó más de 85.000 dólares, actualmente puede llegar a generar más de 300.000 dólares de ingresos, por lo que se ha podido dar la vida que siempre “soñó”.
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En cuanto a la relación que tiene con su familia, la joven manifestó que no es la mejor y que sus padres siempre le piden que tenga alejadas sus actividades de ellos, mientras que la intentan convencer para que siga por el camino de la religión.
“Mi mamá y mi papá han dejado muy claro que no debo hablar con nadie sobre mi trabajo y mi forma de vida. Ambos tratan de hacerme regresar a la iglesia (…) Nuestra relación no es la más fuerte, así que pueden imaginar cómo son esas conversaciones”, relató.
A pesar de esto, la también influenciadora afirmó es completamente feliz con su vida.
