Con lágrimas y la mirada perdida en el infinito intentado buscar en su memoria sus mejores recuerdos, centenares de personas dieron hoy el último adiós en Guatemala a Erick Jeremías Rivas, unas de las víctimas que ha dejado la erupción del Volcán de Fuego.
En el cementerio de Alotenango se respiraba un ambiente pesado. Familiares y amigos lloraban desconsolados mientras la lluvia daba un respiro para despedir a este joven, de 20 años, que murió en el área del desastre cuando iba a visitar a su novia.
La joven, originaria de la aldea San Miguel Los Lotes, estaba presente en el cortejo fúnebre. Llorándolo desconsolada.
Con una bandera guatemalteca sobre su ataúd, sus hermanos despidieron al joven, aunque también estaba presente su madre adoptiva, una señora que lo había aceptado en su casa como uno más de la familia y que corrió con los gastos, reporta Efe.
Erick es una de las 99 víctimas que ha dejado tras de sí la mayor erupción del Volcán de Fuego de Guatemala, donde este miércoles continuaron las complejas labores de búsqueda para encontrar a más supervivientes y desaparecidos.
