Un gato callejero invadió una pasarela en Estambul y consiguió su minuto de fama ante decenas de espectadores.
Cuando las modelos realizaban su desfile, este felino se subió a la pasarela se sentó y comenzó a lamerse para quedar bien limpio, luego se lanzó a las piernas de las modelos jugando con los trozos de tela que colgaban de los vestidos.
Pero al final el gato callejero al parecer quiso hacerse famoso a si que decidió ir detrás de una de las chicas, modelando por la pasarela como la gran estrella de la noche, mientras era fotografiado y despertaba las sonrisas de los asistentes.