El expresidente de Perú Alberto Fujimori, indultado de la condena que cumplía en una prisión construida expresamente para albergarlo, tenía una celda con todas las comodidades para no agravar su salud, principal motivo esgrimido para liberarlo, aseguró la congresista Indira Huilca.
La parlamentaria del bloque de izquierdas Nuevo Perú, que visitó la celda de Fujimori junto a su compañera Marisa Glave horas después de que se diera el indulto, constató que el exmandatario disponía de tres ambientes equipados con una cama ortopédica regulable, un tanque de oxígeno, televisor, teléfono, cocina y una biblioteca.
“Son espacios de excepción para un reo en nuestro país”, afirmó Huilca en referencia a las precarias condiciones carcelarias de los presos en Perú, normalmente recluidos en hacinadas prisiones donde se ven obligados a compartir celdas entre varias personas.
La congresista descartó que las condiciones de la celda de Fujimori puedan contribuir a un empeoramiento de su salud, como argumentó la junta médica que lo evaluó y recomendó seguidamente al presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, que otorgase el indulto, lo que finalmente hizo en Nochebuena