Foto: Suministrada
La situación de Aída Merlano, excongresista conservadora que fue condenada por pertenecer a una red de corrupción por compra de votos en 2018, se complicó tras su recaptura en territorio venezolano porque cuando fue detenida, estaría dentro de este país de manera ilegal, portando documentos falsos y con la fuerte sospecha de que su ingreso fue por alguna trocha o paso no permitido.
Al momento de darse a conocer la noticia de la detención de esta mujer, se empezó a especular sobre la responsabilidad que tendría que enfrentar en territorio venezolano, viendo que en su país natal debería regresar a la prisión donde estaba recluída dentro de la condena por 15 años, además iba a enfrentar cargos por la fuga que protagonizó el pasado 1 de octubre de 2019, según lo informó el fiscal (e) General de la Nación, Fabio Espitia.
Según lo informó el abogado venezolano Tarek William Saab, el Ministerio Público presentó ante el juzgado 13 de control a la exsenadora en cuestión, dicha ciudadana fue imputada por el Fiscal 35 por los delitos de ususrpación de identidad, uso de documento falso y asociación para delinquir; mientras que el hombre con el que fue encontraba Merlano, recibió la imputación por los delitos de encubrimiento y asociación para delinquir.
La exsenadora fue capturada el pasado lunes cuando se encontraba en compañía de, Jacob Manuel Vargas, identificado como su pareja sentimental, y de una mujer que presta servicios generales en el conjunto residencial Costa del Sol, del barrio El Milagro en Maracaibo; dicho operativo fue realizado por miembros de la Fuerza de Acciones Especiales.
