La Fiscalía imputará a policías por los homicidios de tres civiles durante las manifestaciones en el marco del Paro Nacional, que comenzaron el miércoles de la semana pasada y según ese organismo han dejado al menos 11 muertos, aunque ONGs como Temblores elevan esa cifra a 37.
“Tres de esos homicidios les serán imputados a miembros de la Policía Nacional en el marco de estas manifestaciones”, expresó el fiscal general, Francisco Barbosa, en una declaración conjunta con el defensor del pueblo, Carlos Camargo.
Barbosa recordó que la Defensoría informó de 24 homicidios durante las protestas y que la Fiscalía, luego de utilizar “todos los mecanismos de esclarecimiento judicial”, determinó que “11 muertes violentas se dan por ocasión de esas manifestaciones, siete están en verificación y seis homicidios no tienen vínculo”.
Las manifestaciones arrancaron el 28 de abril contra la ya retirada reforma tributaria del Gobierno y hoy continúan, entre otras cosas, en rechazo a la brutalidad policial.
El descontento social sigue volcado en las calles, donde también se han vivido caóticos días de violencia.
En cuanto a los desaparecidos, según la Defensoría, 89 personas han sido reportadas como desaparecidas desde que comenzaron las manifestaciones pero el fiscal Barbosa aseguró que 47 personas “ya fueron ubicadas”, de acuerdo a últimos informes.
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El defensor Camargo dijo, por su parte, que “está activado un mecanismo de búsqueda que consiste en visitar Medicina Legal, las unidades de reacción inmediata (URI), las estaciones de policía y los centros de protección por traslado, así como también hospitales y clínicas”.
El Gobierno insiste en que grupos armados ilegales son los instigadores de la violencia, pero elude dar explicaciones sobre el desproporcionado uso de la fuerza pública que han denunciado organismos internacionales como la ONU, la Unión Europea y Amnistía Internacional.
Mientras tanto, distintos sectores acusan al presidente Iván Duque de esquivar la responsabilidad de la fuerza pública, que es acusada de muertes ocurridas durante las manifestaciones.