Foto: Comisión de la Verdad Antioquia
“Reconocemos el secuestro indiscriminado de personas en Sonsón (Antioquia) donde, con la modalidad de pescas milagrosas, privamos de la libertad a humildes trabajadores y comerciantes… Nos responsabilizamos y pedimos perdón a todos los pobladores del municipio de Nariño por las tomas guerrilleras… A los argelinos les decimos que sí tuvimos menores de edad en nuestras filas”.
El pasado primero de diciembre la comisión de la verdad de Antioquia hizo públicas las declaraciones de Jesús Mario Arenas Rojas, excomandante del Frente Urbano Jacobo Arenas, quien ante un grupo de víctimas del Oriente Antioqueño, junto con mas exguerrilleros sostuvo diálogos y reconoció abiertamente haber sido culpables de llevar a cabo estos hechos.
“Estos escenarios son muy complejos, porque al escucharlos a ustedes se nos arruga el corazón y nos duele más el alma comprobar que muchas de las cosas que dicen las cometimos nosotros”afirmó el excomandante ante las declaraciones delas víctimas.
Todo este proceso se llevó a cabo gracias al seguimiento de la Comisión dela verdad en Antioquia, donde durante seis meses, la Comisión escuchó a las víctimas, y entre encuentros locales, entrevistas y demás espacios de fortalecimiento de los acuerdos, dio como resultado el acercamiento con los actuales retirados de las disidencias.
“La zona páramo del Oriente antioqueño fue uno de los principales escenarios del conflicto armado en el departamento por su conexión con Caldas y el Magdalena Medio” afirma la Comisión de la Verdad.
A la fecha se encuentran alrededor de 84.246 víctimas de diferentes grupos armados, consecuencia de que en la región transitaban frecuentemente grupos armados ilegales como el ELN y las Farc lo que desencadenaba enfrentamientos con la Fuerza Pública. Por otra parte en el caso específico de la toma guerrillera de Nariño en 1999, los excombatientes reconocieron el daño a familias humildes, las muertes de inocentes, y así mismo el reclutamiento de niños niña y adolescentes.
“Su ingreso a la organización privó a sus familias de los afectos del hogar, de su educación, de su trabajo en su parcela. Sabemos que en Argelia y en todo el territorio hay madres buscando a sus hijos y nos comprometemos a ayudar localizar y a ubicar restos para entregarlos a sus seres queridos”.
Por último, el encuentro finalizó con compromisos por parte de los exguerrilleros, en done se estipula que ellos deben responder a las peticiones de verdad en cada uno de los municipios, presentar información precisa que aporte a la búsqueda activa de las personas desaparecidas.
