El golden retriever, que es aficionado al béisbol, se está volviendo viral por su dedicada obediencia a la hora de tomarse una foto con un perro caliente en la boca.
El detrás de cámaras de la selfie fue registrado por otro aficionado que se sorprendió de como el canino posaba para la foto con el hot dog en la boca sin comérselo.
El buen ejemplo de este aficionado en el estadio de Washington y su obediencia hicieron que al final su dueño le permitiera que el perro se comiera la tan anhelada comida y la acción se volvió famosa gracias a las redes y los medios de comunicación locales.