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Tras una denuncia que los ciudadanos dieron a conocer a Cablenoticias del cierre de comedores presenciales por orden de las autoridades de Bogotá, el Distrito indicó las razones por las que se vio obligado a realizar esa acción.
La Secretaría de Integración Social explicó que esa medida se tomó para evitar posibles aglomeraciones, pero garantizó que las ayudas alimentarias llegarán a los sectores más vulnerables ya identificados, que forman parte de la población que acudía a estos centros.
En la denuncia, se aseguraba que los trabajadores de los comedores iban a ser despojados de sus cargos, frente a lo cual, la secretaría Xinia Navarro, respondió que “unos son los funcionarios de la dirección de abastecimiento, nutricionistas, contratistas y otros son funcionarios de planta que continuarán de manera permanente con esa función, los otros son los operadores de los comedores, que son contratistas del estado que son seleccionados a través de procesos de competitividad y dependerán de las transformaciones que se realizarán, de las propuestas que presente, entre otras variables”.
A la fecha, más de 70,000 familias han sido identificadas inicialmente, por la Alcaldía de Bogotá, en más de 300 barrios para ser beneficiarios de estos mercados que se entregarán de manera gradual.