Su construcción acaba de comenzar. Para ello se ha parado durante un año las operaciones de Mayall: con 45 años, este telescopio se prepara para crear el mapa tridimensional más grande del universo.
Con este atlas “se podría ayudar a resolver el misterio de la energía oscura, responsable de la expansión acelerada del universo”, señala el IAA-CSIC, cuya participación y la de otros centros españoles en los prototipos se describen en un artículo publicado recientemente en Monthly Notices of the Royal Astronomical Society, reporta Efe.
En el universo, la materia normal es la que integra los planetas, cuerpos o estrellas que vemos brillar y representa el 5 %. El resto está en forma de energía y materia oscuras, fenómenos distintos.