El presidente de la Federación Colombiana de Fútbol, Ramón Jesurún, ha explicado que posiblemente la causa por la que en Bogotá ya no jugará la Selección Colombia, tendría que ver con la capacidad de aficionados frente a los otros escenarios del país.
En una entrevista, Jesurún ha indicado que los ingresos en taquilla tendrían un efecto preponderante para la empresa dueña de los derechos de la Copa América y por esa razón se habría fomentado el cambio.
“De lo que me he enterado es que El Campín es el estadio más pequeño de los 4 escogidos para Copa y si bien no se ha definido el ingreso de público, fue una variante comercial que tuvieron en cuenta”, manifestó el directivo primero.
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Asimismo, explicó la dinamica que se está gestionando para el ingreso de espectadores que sustenta lo anteriormente afirmado:
“Aunque haya un porcentaje de espectadores que ojalá nos lo autoricen, ese porcentaje es proporcional a la capacidad de cada estadio. No hay nada distinto a ello en la decisión”, añadió.
No obstante, según el presidente de la Federación, actualmente esta en conversaciones con la Conmebol para que el partido en Bogotá sea devuelto, teniendo en cuenta también, que la fecha aplazada de eliminatoria se disputará una semana antes de la competencia suramericana.