James Rodríguez fue la estrella de Colombia en el Mundial 2014 y nuestra selección espera que pueda mostrar nuevamente su talento en el encuentro clave del jueves ante Senegal para avanzar a octavos de final en Rusia.
El jugador de 26 años ha tenido un desempeño irregular a nivel de clubes pero parece haberse puesto en forma justo cuando su selección más lo necesita.
Luego de haber iniciado el torneo en el banco de suplentes por no estar en condiciones físicas óptimas cuando Colombia cayó 2-1 ante Japón, se mostró en su mejor momento en la victoria 3-0 sobre Polonia.
“Es un jugador fundamental en nuestra selección”, dijo el entrenador José Pékerman sobre el centrocampista antes del partido con Colombia.
Con la necesidad de un triunfo en el último partido del Grupo H contra Senegal el jueves en Samara, el conjunto cafetero volverá a confiar en que el creativo jugador lo guíe a la etapa de los 16 mejores.
En un equipo con otros jugadores de calidad en ataque como Radamel Falcao García y Juan Cuadrado, Rodríguez marca la diferencia y los colombianos fueron notablemente más amenazantes con el creativo en el campo ante Polonia.
La brillante actuación de Rodríguez en Brasil hace cuatro años llevó Colombia a cuartos de final, le aseguró el botín de oro y allanó el camino para un pase de unos 80 millones de dólares al gigante español Real Madrid.
Sin embargo, después de tres años en la capital española, donde no pudo igualar el impacto que tuvieron Gareth Bale o Cristiano Ronaldo, fue enviado al Bayern Munich.
En el Bayern, donde se encuentra a préstamo por dos temporadas, Rodríguez luchó en un principio para estar en forma pero bajo las órdenes del entrenador Jupp Heynckes se convirtió en un miembro clave del equipo, que aseguró su sexto título consecutivo en la Bundesliga.
Ahora parece preparado para dejar su marca una vez más en el escenario más grande del fútbol. Su pase a Cuadrado para que anote el tercer gol contra Polonia fue posiblemente la mejor asistencia del torneo.
Rodríguez es una especie de especialista en la Copa Mundial, ya que anotó seis goles y otorgó cuatro asistencias en siete partidos, y tendrá como objetivo aumentar esa cuenta contra los africanos, informa Reuters.
Si es protagonista para llevar a Colombia a la segunda ronda, el “chico de oro” de hace cuatro años podrá sentir que tiene una vez más el mundo a sus pies.
