Un grupo de científicos del Observatorio Austral Europeo (ESO) lograron observar con “un detalle sin precedentes”, los procesos que se dan en la superficie de una estrella gigante roja, según un estudio que publica Nature.
La estrella se llama Pi Gruis, que tiene aproximadamente la misma masa que el Sol, pero su diámetro es 350 veces más grande.
Según los científicos, en unos 5.000 años nuestro sol se inflara para convertirse en una estrella roja similar.
Pi Gruis esta situada a 530 años luz de la Tierra, su nombre se compone de la letra griega Pi y el nombre de la constelación a la que pertenece, Gruis o la grulla, según el llamado sistema de denominación de Bayer.
Ese sistema nombra las estrellas de una constelación con letras del alfabeto griego, siguiendo el orden del mismo. La estrella menos brillante de una constelación lleva la letra Alfa y la menos brillante al letra Omega, reporta Efe.
Un equipo del Observatorio Europeo Asutral (ESO), dirigido por Claudia Paladini, utilizó el instrumento PIONIER del Very Large Telescope, en Chile, para observar Pi Gruis y descubrió que su superficie tiene unas pocas placas o células convectivas, y que una de ellas tiene un tamaño de unos 120 millones de kilómetros (alrededor de un cuarto del diámetro de la estrella).