La colombiana Caterine Ibargüen, vigente campeona olímpica, golpeó primero en el duelo que mantiene con la venezolana Yulimar Rojas, tras imponerse este viernes a la campeona mundial en la final de triple salto de la reunión de Lausana, octava parada de la Liga de Diamante, con un mejor intento de 14.89.
Siete centímetros que Yulimar Rojas, que tuvo que conformarse con la segunda plaza en la ciudad suiza con un registro de 14.82 metros.
Mucho más lejos quedó la española Ana Peleteiro, compañera de entrenamiento de Rojas, que ni tan siquiera pudo acceder a la mejora, tras firmar un registro de 14.16.
La saltadora española, bronce en los Campeonatos de Europa disputados el pasado año en Berlín, no pudo repetir las buenas sensaciones que dejó hace apenas un par de semanas en Huelva donde logró un salto de 14.33.
Tal y como le ocurrió también a Rojas, que se quedó en Lausana a 24 centímetros de los 15.06 que la venezolana firmó el pasado 20 de junio en la capital onubense, la mejor marca mundial del año.
Y eso que Rojas se puso en su segundo intento en cabeza de la clasificación con un salto de 14.82, que hacía presagiar una gran marca de la venezolana en el estadio Pierre de Coubertin de la ciudad helvética.
Sin embargo, Yulimar Rojas, que tan sólo firmó dos saltos válidos, no logró mejorar su registro, todo lo contrario que Caterine Ibargüen, que volvió a demostrar, una vez más, su carácter competitivo.
La campeona olímpica, que arrancó con unos “discretos” 14.57, no se desmoronó por los tres nulos que encadenó en sus siguientes tres tentativas y en su quinto saltó voló hasta los 14.89, la mejor marca del curso de la colombiana, que le garantizaron el triunfo. EFE