El alcalde de Bucaramanga, Juan Carlos Cárdenas Rey, ha identificado varias problemáticas en los centros penitenciarios que no solo deberían recaer sobre los escándalos del Inpec. Una de las más crecientes es la falta de cooperación por parte del organismo público para resguardar a las personas sindicadas y condenadas en las cárceles, ya que en vez de estar allí permanecen en las estaciones de policía.
Hasta la fecha en la ciudad de Bucaramanga se cuenta con un porcentaje de 1210% de hacinamiento en las instalaciones de la Policía Nacional que tienen capacidad para 42 detenidos, sin embargo, se hayan alrededor de 600 personas penadas en la institución.
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Ante esto se ha hablado sobre desarrollar una propuesta que analice la posibilidad de tener cárceles concesionadas, la cual se dará a conocer en las próximas semanas.
“Este problema es de fondo y viene de muchos años atrás: tenemos un sistema carcelario lamentable, insuficiente. Estos son los verdaderos debates que debemos dar, no solo que se hable de los escándalos del Inpec. Debemos empezar a hablar de cárceles concesionadas donde los presos tengan que trabajar para pagarle al Estado, pero también tengan dinero, fruto de su trabajo, para enviar a sus familias”, indicó Cárdenas.
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Lo anterior también debido a que aseguró que estos centros se han convertido en un hotel para los delincuentes, en donde se les suministra alimentación y e incluso privados de la libertad siguen delinquiendo, acto que no se detiene ni cuando inician su proceso de reinserción social. En esta medida requieren que los espacios se conviertan en un lugar donde lleven a cabo actividades de estudio y trabajo para poder pagar la pena.
