El acto de reconciliación buscará rechazar cualquier tipo de violencia y enviar un mensaje de que este tipo de conflictos no se pueden volver a presentar.
La Alcaldía de Bogotá realizó un Puesto de Mando Unificado para verificar la situación de la comunidad indígena Embera, después de los disturbios violentos que se vivieron en la ciudad y que dejaron al menos 27 personas heridas, entre ellos varios policías que fueron víctimas de agresiones por parte de los manifestantes.
La alcaldesa encargada, Edna Bonilla, anunció varias medidas que se tomarán para evitar que este tipo de situaciones se puedan volver a presentar en los próximos días.
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La mandataria (e) explicó que se instalarán mesas permanentes para el cumplimiento de los acuerdos a los que se llegaron y con los que buscan el retorno seguro de las comunidades indígenas a sus territorios de origen, esto después de analizar detenidamente la situación con el ministro del Interior, Alfonso Prada.
Bonilla señaló que desde el Distrito se revisará la minuta de los alimentos para poder ajustar y que estos sean acorde a las prácticas de la comunidad.
“Tendremos brigadas de atención con el Ministerio de Salud y la Cruz Roja. Aclaramos que no se han dado epidemias de enfermedades, solo brotes que se han controlado a tiempo”, manifestó.
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Igualmente, la alcaldesa indicó que se realizará un evento de reconciliación entre la Policía Nacional y los líderes de la comunidad Embera, esto con el objetivo de rechazar cualquier tipo de violencia y enviar un mensaje de que este tipo de conflictos no se pueden volver a presentar en la capital del país.
Se tiene previsto que este acto de reconciliación se realice la próxima semana, tiempo en el cual también se revisará qué otro lugar puede servir para albergar a los indígenas, teniendo en cuenta que actualmente se encuentran en La Rioja y han denunciado que se encuentran en hacinamiento.
