Al parecer, el excongresista habría tenido nexos con el grupo paramilitar que ejecutó la masacre en la que que murieron 12 miembros de una comisión judicial.
La Fiscalía General de la Nación acusó al excongresista Tiberio Villareal Ramos por su posible participación en la masacre de La Rochela, en la que fueron asesinados 12 miembros de una comisión judicial por un grupo paramilitar el 18 de enero de 1989 en una zona rural del municipio de Simacota, Santander.
La Fiscalía detalló en un comunicado que “el excongresista habría tenido nexos directos con el grupo paramilitar (conocido como ‘Los Macetos’) que ejecutó el crimen e insistió para que los servidores judiciales fueran asesinados”.
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En ese sentido, las pruebas evidencian que “Villareal Ramos se habría puesto de acuerdo con los grupos paramilitares del Magdalena Medio que ejecutaron el crimen” para “recibir apoyo político y financiero, y aumentar su caudal electoral” en Santander.
En esa matanza fueron asesinados doce miembros de una comisión judicial formada por quince personas, tres de las cuales sobrevivieron al ataque.
Los servidores judiciales, dice la Fiscalía, fueron interceptados por hombres armados que, “mediante engaños”, se los llevaron y les dispararon indiscriminadamente en un sector conocido como La Laguna.
El director especializado contra las Violaciones a los Derechos Humanos de la Fiscalía, Hugo Tovar, dijo que por los presuntos nexos del excongresista con los paramilitares se “presionó para que fueran asesinados los integrantes de la comisión judicial que investigaba la desaparición de 19 comerciantes de la región” el 6 de octubre de 1987.
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Igualmente, añadió, el objetivo de los criminales era robarles “el expediente y la evidencia relacionada con el caso”.
“Tiberio Villareal Ramos deberá responder en juicio como posible responsable de los delitos de homicidio agravado y tentativa de homicidio agravado”, concluyó la Fiscalía.