El arquero de la selección chilena, Gabriel Arias, consideró que no hay ningún favorito en el partido de cuartos de final de la Copa América que disputarán el viernes Chile y Colombia.
“No hay favoritos, son 90 minutos y debemos estar atentos a los detalles”, dijo en rueda de prensa Arias, nacido en Argentina y nacionalizado chileno.
Arias, que ha sustituido en el arco chileno a Claudio Bravo, afirmó que con el paso de los partidos ha ido ganando confianza y se siente más cómodo en el equipo titular
“Se ha hecho una buena primera fase. Yo estoy tratando de no arriesgar de más, estoy en lugar que lleva una responsabilidad muy grande”, dijo.
El arquero le restó importancia al hecho que Colombia haya tenido un día más de descanso porque terminó antes la fase de grupos y a que no puedan conocer un día antes del partido el césped del Arena Corinthians para mantener en buen estado el terreno de juego.
“Lo puedo reconocer antes del partido, ahí te das cuenta del estado. En la entrada en calor te das cuenta de si tendrás problemas con los controles”, explicó.
Arias admitió que ha preparado la atajada de penaltis, uno de sus puntos fuertes, por si el partido del viernes llega con empate en el marcador al término de los noventa minutos reglamentarios.
Y aseguró también de que no se percató en un primer momento de la curiosa jugada que protagonizó el ariete uruguayo Luis Suárez el lunes pasado, cuando reclamó penalti por una mano de Arias dentro del área.
Lo primero que le vino a la cabeza, dijo, fue el penalti que cometió a Enner Valencia en el triunfo ante Ecuador (1-2), y luego vio el extraño reclamo de Suárez en internet. EFE