Seis días después de la ruptura de un dique de una represa del gigante minero Vale en Brumadinho, las autoridades de Brasil elevaron el número de víctimas a 99, mientras 259 personas siguen desaparecidas, de acuerdo al balance divulgado por los bomberos de Minas Gerais.
El portavoz del Cuerpo de Bomberos de ese estado (sudeste), el teniente Pedro Aihara, explicó en una rueda de prensa que los trabajos de búsqueda y rescate están distribuidos en 18 puntos a lo largo del río de lodo y residuos minerales que sepultó gran parte de Brumadinho y dejó además a 175 personas sin hogar.
“Determinamos 18 puntos de búsqueda a lo largo del trayecto de los residuos y no existe ninguna área en este momento que no cuente con equipos de búsqueda y rescate”, explicó Aihara.
El teniente añadió que, pese a los 99 muertos confirmados, “más cuerpos y segmentos de cuerpos” siguen siendo hallados y transportados a cada momento.
A lo largo del día, la labores de los servicios de búsqueda y rescate se vieron dificultadas por las intensas lluvias y los fuertes vientos que golpearon la región, aunque, según los bomberos, no llegaron a influir de manera “significativa” en los trabajos.
Después del colapso, un río de lodo y residuos minerales se arrastró por esta ciudad de unos 34.000 habitantes y sepultó las instalaciones de la propia empresa, así como diversas viviendas y establecimientos de la comunidad local.
Más de 500 personas participan en las acciones de búsqueda y rescate, entre ellas refuerzos de tropas oriundas de Sao Paulo, unos 58 voluntarios y 136 militares israelíes que llegaron el lunes con más de 15 toneladas de equipamientos.
Por su parte, el presidente de Vale, Fabio Schvartsman, anunció la víspera que la compañía “extinguirá” todas las represas que cuenten con estructuras similares a la que produjo esta catástrofe ambiental y paralizará de manera temporal sus actividades en el estado Minas Gerais.Efe