Este viernes, las autoridades capturaron a ocho guardas de seguridad, quienes aprovechando su oficio y la confianza de los propietarios de viviendas de conjuntos cerrados en los que laboraban, habrían permitido el ingreso de delincuentes para que hurtaran las residencias, a cambio de una parte del botín.
De acuerdo con las denuncias, los vigilantes habrían participado en por lo menos ocho hurtos a viviendas donde las pérdidas ascienden a más de 1.150 millones de pesos, para esto usando las empresas de seguridad y así no ser descubiertos por las autoriades y ni levantar sospechas.
En las investigaciones también se pudo establecer, que los guardias de seguridad eran cambiados constantemente, y que cometían los hurtos a través de lujosos vehículos para despistar a los demás ciudadanos.