Indígenas de nueve países amazónicos participan en una movilización para pedir el fin de las “agresiones” a la Amazonía y sus poblaciones, informó la Coordinadora de las Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (Coica).
Bajo el lema de “Amazonía viva, humanidad segura”, se celebra la movilización en los países bañados por el Amazonas con diferentes actos para llamar la atención sobre los principales problemas que afectan a las poblaciones y su entorno, como el avance de la deforestación, la caza furtiva, contaminación de ecosistemas por el petróleo y la minería, o el trazado de carreteras.
En Quito, por ejemplo, tuvo lugar una movilización en la que participaron varios dirigentes de las comunidades indígenas.
Nemo Andy Giguita, vicepresidenta de Nacionalidad Waorani del Ecuador (NAWE), que agrupa a 4.000 personas, llamó al Gobierno ecuatoriano a suspender la construcción de carreteras.
“Tienen que impedir que se abran las carreteras en la selva, especialmente en las comunidades waorani. Queremos que nos den otras alternativas para mejorar”, declaró a Efe al incidir en que las actividades petrolíferas han conducido a la construcción de una vía que afecta a las poblaciones de Napo y Orellana.
En la misma línea se expresó Marlon Vargas, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de la Amazonía Ecuatoriana (Confeniae), al referir que los pueblos de la cuenca amazónica están “reclamando que ya no se haga más actividades petroleras y mineras dentro de los territorios ancestrales, sobre todo en la Amazonía centro y sur, en los territorios de la nacionalidad Shuar”.
Los dirigentes reunidos hoy en Quito acogieron con beneplácito el llamamiento hecho esta semana por el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, quien pidió en la sede de la ONU a la comunidad internacional esfuerzos para asegurar el futuro de la Amazonía, dado el papel clave de esta región en la dinámica global del clima.
La Coica es una organización internacional que representa a las poblaciones nativas de Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Guayana Francesa, Perú, Surinam y Venezuela, y agrupa a 400 organizaciones locales, 5.000 comunidades nativas y 390 pueblos del Amazonas.
La Confederación informó asimismo de la entrega de una carta al responsable para América Latina de la Cancillería de China, en la que solicita entablar un diálogo para plantear su preocupación por la presión que ejercen los grandes proyectos extractivos y de infraestructuras en los que participan diversas empresa chinas, informa Efe.
“Representan amenazas muy graves a nuestros territorios, a la vida, a la salud y a la supervivencia de los pueblos amazónicos”, denuncia la misiva.