El papa Francisco aseguró que, a pesar del odio que han generado tantos años de conflicto en Colombia, percibió “las ganas de seguir adelante en el proceso de paz”, durante una rueda de prensa en el avión en el que regresó.
Al respecto de la división del pueblo colombiano tras los acuerdos del Gobierno con las Farc, Francisco señaló que tras muchos años de guerrilla “se acumula mucho, mucho. Mucho odio, mucho rencor, mucha alma enferma. Y la enfermedad no es culpable, llega”.
“Estas guerrillas, los paramilitares, la corrupción, cometieron pecados grandes que causaron esta enfermedad del odio”, agregó el pontífice al contestar a una de las preguntas de los periodistas, Daniel Tobón de la alianza Cablenoticias y Cristovisión, que le acompañaron en este viaje.
Para el papa, “hay pasos que dan esperanza” y citó el último acuerdo de alto el fuego del Gobierno con el Ejército de Eln, que agradeció mucho.
Y consideró, “pero hay algo mas que yo percibí, las ganas de ir adelante con este proceso, que va mas allá de las negociaciones, es un deseo espontáneo y ahí esta la fuerza del pueblo”.
A otra de las preguntas, sobre la validez de este proceso de paz, Francisco contestó, como en la homilía de ayer en Cartagena con la que cerró el viaje, que “un proceso solo irá adelante si el pueblo lo acepta”.
“Si el pueblo no lo acepta, irá adelante solo por un tiempo, más o menos. El protagonista de la pacificación es el pueblo o solo se llegará hasta un cierto punto”, agregó.
Y aseguró que solo “cuando un pueblo toma el proceso en las manos puede terminar con la guerra”.
Francisco también se dijo “conmovido por la alegría, la ternura, la juventud y la nobleza del pueblo colombiano”, y aseguró que es “un pueblo noble, que no tiene miedo a expresar lo que siente, que no tiene miedo a sentir y hacer ver lo que sienten”.
Aunque estuvo anteriormente tres veces en Colombia, explicó que fueron breves estancias -dos a Bogotá y una en La Ceja- y por tanto “no conocía la Colombia profunda que se ve en las calles”.
“Agradezco el testimonio de alegría, de esperanza, de paciencia, el de sufrimiento de este pueblo. Me hizo muy bien”, aseguró.