El actor californiano Jeremy Renner, protagonista de la oscarizada película “The Hurt Locker” (2008) y que recibirá en Karlovy Vary el “President’s Award”, dijo que prefiere cuidar a su hija que rodar en el extranjero.
“Ser padre es mucho más importante para mí que ir a rodar en Oriente Medio”, dijo Renner en rueda de prensa al ser preguntado si volvería a participar en una película filmada en Oriente Medio, como lo hizo en “The Hurt Locker”, bajo la dirección de Kathryn Bigelow.
“Entonces era otro momento de mi vida, pero ahora sólo ruedo en Norteamérica, porque tengo que ir a dejar a mi hija en el colegio e ir a recogerla”, añadió el actor, que en el certamen checo presenta su último trabajo, “Wind River”, una película de suspense que tiene lugar en una reserva india de Wyoming (EEUU).
Dice ser, a sus 46 años, un padre novel, que no joven, y que ese papel de su vida real es ahora prioritario para él.
“Tenemos televisión en casa, pero nunca está encendida. Nos gusta hacer cosas, desarrollar habilidades, estimular el cerebro, darle confianza a mi hija y por supuesto entretenerla, porque me dedico a eso”, explicó.
Tras haber sido catapultado a la fama con la película de Bigelow, Renner trabajó en “Arrival” (2016) y encarnó a Hawkeye (Ojo de Halcón) en la serie de súperheroes “Avengers”.
Pero este año, rodando la última entrega de la saga “Avengers: Infinity War”, se fracturó el codo derecho y la muñeca izquierda, por lo que tuvo que abandonar.
De todas formas, el cineasta no se deja encasillar en ese tipo de papel y dice no sentirse “como un hombre de acción”.
De hecho, con “Wind River”, dirigida por Taylor Sheridan, ha retornado a un cine más intimista.
En ese filme vuelve a trabajar con Elizabeth Olsen, que también integró el elenco de “Avengers”.
Renner recibirá mañana, en la clausura del festival, el “President’s Award” por su importante contribución al cine.
